Historia de la proctología
Las primeras referencias que tenemos acerca de las enfermedades del ano proceden del Código de Hammurabi ( hacía el 2200 a. J.C.), en donde se fijan los honorarios de los proctólogos. Posteriormente en el Papiro de Tebas ( 1500 a. J.C.) se encuentran numerosas recetas para enfermedades ano-rectales. En tablillas de escritura cuneiforme de la biblioteca de Asurbanipal se hallan datos sobre este conjunto de enfermedades (siglo XII a.J.C.). También en el antiguo Egipto existían médicos proctólogos; en el Papiro Chester Beatty ( 1200 a. J. C. ) se trata exclusivamente la materia proctológica.
En occidente, en el periodo greco-romano; Hipócrates, Galeno, Leonidas, Celso, etc. escribieron también sobre distintas patologías ano-rectales (Img. 1). Ya en el 600 d. C., Pablo Egina escribió un tratado de cirugía, refiriéndose con interés a la fístula de ano.
En la Edad Media la practica de la medicina estaba preferentemente en manos de los monjes (Img. 2), aunque existieran profesionales laicos, tanto cristianos como judíos y árabes. Existen así mismo, durante esta época, muchas supersticiones y cultos paganos, como por ejemplo el «Conjuro contra la Fístula Anal» recogido en un Código del siglo XI, o las imprecaciones a San Fiacro para librarse de las Hemorroides. ( Imgs. 3-7)
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3.-Escuela de Salerno, S. XII. 
4.- Operación de Hemorroides. Escuela de Salerno, S. XII. 
5.-Exploración 
6.- Tacto rectal 
7.- Tacto rectal
John Arderne, cirujano inglés, escribió en 1370 “ Practica Magistri Johannis de Arderne “, en la cual condensó toda su experiencia y conocimientos de la cirugía ano-rectal, siendo considerado por ello, el padre de la Proctología (Img. 8).
8.- John Arderne tratando una Fístula 
9.- Cauterización de Hemorroides en el S. XV.
En el Renacimiento surge la figura de Jerome Fabrice D´Acquapendente ( 1537- 1619) que escribió “ Opera Chirurgica “ donde comenta el tratamiento de las fístulas.
Famosa fue la intervención quirúrgica realizada el 18 de noviembre de 1686 en el Palacio de Versalles al rey de Francia Luis XIV. El Rey Sol padecía una fístula anal que fue intervenida por los cirujanos Félix de Tussy y Bessieres. Después de varias intervenciones, el 15 de enero de 1687 el Rey pudo considerarse curado.
En el siglo XVIII no hay grandes avances en el campo de la protología.
En el siglo XIX se funda el hospital S. Mark´s en Londres y se convierte en la meca de las enfermedades ano-rectales. Su director Frederick Salmons popularizó su operación para hemorroides internas con ligadura e incisión. Como curiosidad recordar que Napoleón pierde en 1815 la Batalla de Waterloo por una trombosis hemorroidal externa “atontado por la falta de sueño y el opio administrado, no pudo montar a caballo hasta las 10, y ya no pudo enderezar el curso de la batalla“.
A principios del siglo XX, Raoul Bensaude, padre de la proctología francesa, describió sus investigaciones en un Tratado de Rectoscopia. Y así llegamos hasta nuestros días en donde la PROCTOLÓGIA es una especialidad reconocida en todo el mundo.
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