¿Qué es una rectorragia?
Recibe el nombre, en medicina, de Rectorragia la emisión o expulsión de sangre roja viva por el ano durante o después de las deposiciones, de forma aislada o junto con las heces. Siempre tiene alguna causa que es importante diagnosticar. Es un signo frecuente, pero que no por ello se debe dejar de estudiar y llegar a conocer la causa del sangrado. Se estima que más de un tercio de la población ha tenido alguna vez una rectorragia.
Causas de las rectorragias
Las causas de las rectorragias son muy variadas. Desde la existencia de una enfermedad anorrectal benigna (hemorroides, fisuras anales, úlceras rectales, proctitis) hasta enfermedades rectales o de colon malignas (cáncer colorrectal), pasando por enfermedades inflamatorias intestinales (Colitis Ulcerosa, Enfermedad de Crohn), Divertículos, Pólipos colorrectales que no suelen producir sangrado hasta que se ulceran o desgarran por el aumento de tamaño, Malformaciones vasculares, etc.
Afortunadamente, en la mayoría de casos suelen deberse a hemorroides o fisuras anales. Pero es importante, que el paciente acuda a un médico especialista en proctología cuando tiene un sangrado por ano, aunque sea en pequeña cantidad, para descartar patologías malignas o poner en tratamiento enfermedades benignas que originen dicho sangrado. Debemos recordar sobre todo, que el estudio se hace imprescindible en pacientes con edades superiores a los 45-50 años, por la mayor incidencia de cáncer colorrectal, y también en aquellos que tienen otros familiares afectados por esta enfermedad.
Por otro lado, se debe tener en cuenta que una pérdida de sangre continuada, aunque esté causada por una enfermedad benigna, puede repercutir en el estado general del paciente que la sufre, ocasionándole una anemia.

Exploración o inspección de la zona perianal
Por ello, todo paciente que acude a nuestras clínicas (en Alicante y Murcia), tras realizarle una detallada anamnesis, se realiza una exploración o inspección de la zona perianal, seguido de un tacto anal y una anuscopia para detectar el origen del sangrado. A veces, es necesario complementarlo con otras exploraciones más avanzadas, como rectosigmoidoscopia, colonoscopia, analítica para saber la repercusión general de la pérdida de sangre, radiografía con enema opaco (últimamente en discusión su utilización para el estudio de rectorragias), etc. Últimamente ha tomado valor la Colonoscopia virtual con tomografía computarizada o con resonancia magnética, que obtiene imágenes en o dos o tres dimensiones del recto y colon. La cápsula endoscópica no es útil para la exploración del colon en la actualidad.
Patologías que producen rectorragia y tratamientos
- Sin duda, las patologías que más frecuentemente causan sangrado por ano o rectorragia son las hemorroides. Suele caracterizarse el cuadro por una expulsión de sangre roja brillante en el esfuerzo defecatorio acompañado de inflamación o prolapso de uno o más paquetes hemorroidales, escozor y/o molestias en ano. En nuestras clínicas, el tratamiento es variado en función del grado de desarrollo que las hemorroides hayan alcanzado. Desde tratamientos indoloros como la utilización de láser o esclerosis química, hasta cirugía en los casos más graves, siempre previa anestesia local y de forma ambulatoria, esto es, sin hospitalización. Es aconsejable cuando se padece esta enfermedad evitar los tiempos largos de estar sentado en el inodoro, así como los baños de asiento, o el uso indiscriminado de pomadas con corticoides, etc.
- Las fisuras anales, en nuestras clínicas, son la segunda causa de rectorragia. Ésta, suele ser muy escasa y eventual. Y lógicamente no se acompaña de prolapso, aunque a veces la existencia de pólipos perianales o centinelas, pueden confundir al paciente. Siempre se acompaña de dolor importante tras el esfuerzo defecatorio, que puede llegar a durar horas. En nuestra opinión, el tratamiento de una fisura anal crónica debe ser “siempre” una intervención quirúrgica muy sencilla, previa anestesia local y de forma ambulatoria que resuelva el problema definitivamente. No aconsejamos el uso de anestésicos locales, nitroglicerina, o bótox, ya que su efecto suele ser pasajero si es que, realmente, consigue aliviar un poco el dolor.
- Las proctitis, colitis, úlceras rectales o del canal anal, etc. deben ser tratadas de forma individualizada, una vez que se descubra sus causas.
- En la zona perianal, es decir en la piel que rodea el ano, pueden haber enfermedades que la afecten, como infecciones bacterianas o micóticas (de hongos), que en su evolución agrietan la piel, y esas pequeñas heridas, grietas o úlceras, pueden producir un sangrado al hacer la limpieza de la zona tras la deposición. Este tipo de sangrado, que no es una auténtica rectorragia, es el más benigno de todos, curan con un sencillo tratamiento tópico con pomada o polvos, a veces, pueden requerir también un tratamiento por vía oral, si la infección bacteriana o micótica está muy avanzada.
- Y no olvidar, que una rectorragia puede ser el primer síntoma o signo de un cáncer intestinal o rectal. De ahí, la importancia de hacer un diagnóstico precoz.
Por ello, desde Clínica Proctológica del Dr. Tomás Paco, recomendamos acudir lo antes posible a un proctólogo de confianza en cuanto aparezca un sangrado en las deposiciones, para poder así, diagnosticar precozmente la causa que está produciendo ese sangrado y poner un tratamiento adecuado que impida el posterior desarrollo de complicaciones más difíciles de tratar. Por todo lo expuesto, terminamos recordando que “El sangrado en las deposiciones NO es normal”.
Si usted padece o tiene algún síntoma relacionado con la zona anal y/o perianal, puede pedirnos cita, si lo desea, para nuestras Clínicas en Alicante o Murcia en el teléfono móvil; 665100806